El bodyboard es un deporte divertido y apto para principiantes que ofrece horas de emociones en el mar. Ya seas un veterano experimentado, un amante del océano o un completo principiante, surfear algunas olas en una tabla de bodyboard es una receta garantizada para la felicidad. Entonces, si te sientes listo para enfrentarte a las olas, consulta nuestros mejores consejos para el bodyboard, para asegurarte de que te sientas seguro y luzcas como un profesional.
1 Trabajar en tu técnica de natación
Para tener éxito en el bodyboard, necesitas ser un buen nadador. No estamos hablando de la necesidad de ser el nieto de Mark Spitz o el primo de Michael Phelps, pero si te resulta difícil nadar, lo más probable es que termines frenando cuando intentes meterte en las olas. Si alguna vez se te escapa la tabla, querrás saber que te sentirás cómodo nadando para recuperarla o encontrando el camino de regreso a la orilla.
Entonces, apúntate en tu piscina local y empieza a practicar, o reserva algunas lecciones para afinar tu técnica de natación. ¡De esta manera puedes entrar al agua con tu bodyboard con total confianza!
2 Comprender las previsiones
Cuando te inicias en el bod, la ecuación es la misma que en el surf, el kitesurf o el windsurf. Tiempo + conocimiento = seguridad. Conocer las previsiones meteorológicas y las condiciones es fundamental para cualquier sesión. Surfear en condiciones manejables te traerá aún más felicidad. También es recomendable comenzar tu práctica de bodyboard con un amigo o instructor.
3 Tener el equipo adecuado
En términos de bodyboard, ¡nada mejor que la personalización! Un consejo excelente y útil para elegir el tamaño adecuado para usted es que cuando el bodyboard se coloca en el suelo, debe alcanzar, aproximadamente, la altura de tu ombligo.
La tabla no es lo único que importa. Dependiendo de la temperatura del agua, es recomendable llevar un traje de neopreno de buena calidad o un chaleco de lycra para evitar irritaciones, y al mismo tiempo agregar un poco de protección solar.
Para terminar, necesitarás un leash para evitar que la tabla de bodyboard se escape. También necesitarás un par de aletas para evitar molestias.
4 Calentamiento
Asegúrate de estar preparado y caliente antes de saltar a las olas. Una vez que te sumerjas en el mar, siempre debes esperar lo inesperado, en un patio de recreo en constante cambio querrás asegurarte de que tu cuerpo esté listo para cualquier cosa. Para hacer esto, practica cómo colocarte en la posición correcta: acuéstate en la tabla de bodyboard con las manos en la parte delantera y coloca la parte posterior de la tabla debajo de la parte inferior del estómago. Desde aquí, puedes practicar la remada e intentar mover las piernas bajo el agua para acelerar mejo.
5 Escoger la ola adecuada
Como principiante, elige la seguridad en lugar de tratar de superar a los que te rodean. Un buen consejo para principiantes de bodyboard es tratar de resistir la tentación de las olas que son demasiado grandes o demasiado rápidas, y acostumbrarse primero a las olas «manejables» que corren directamente a la playa. Cuando estés listo para regresar a la orilla, mueve los pies en esa dirección mientras remas con fuerza e intenta colocarte de modo que puedas cruzar la parte delantera de una ola y dejar que su poder te lleve con el mínimo esfuerzo. Y… ¡máxima alegría!
Comentarios por Manuel